Escritor por vocación y cineasta por convicción, el peruano Daniel Rodríguez Risco decidió hacer una película de terror después del éxito de su thriller El vientre (2013). Un género ajeno a las historias que él preparaba incluso en libros de cuentos que escribe desde los años 90. Para hacer su filme No estamos solos, se preparó en una labor de investigación en la que descubrió en un seminario que hay alrededor de 17 convenciones de las películas del género, reporta Crónica.
“Decidimos hacer una película que cumpliera con todas las características que encontré y de paso hacer una especie de homenaje a los grandes clásicos del cine de terror como El conjuro, El exorcismo de Emily Rose y, por supuesto, El exorcista. Para eso también quise vivir en carne propia este mundo por lo que trabajamos con un exorcista real que nos llevó a presenciar uno en carne propia”, explicó el director, en entrevista con Crónica.
“Este personaje nos ayudó a desarrollar el guion. Yo era muy escéptico con el tema hasta que vi el caso de una niña de 16 años, que no medía más de un metro 55 a la que vi como se transformó de un momento a otro. Nunca he visto una mirada como esa ni en el cine y es cierto todo lo que ocurre cuando la piel se quema al echarles agua bendita o ponerles una cruz en la frente”, añadió.
La película aborda la historia de una familia, Mateo (Marco Zunino), Mónica (Fiorella Díaz) y Sofía (Zoe Arévalo) de 8 años, que se mudan a una casa a las afueras de la ciudad. Desde la primera noche, la niña es acechada por algo aterrador. Estos acosos se hacen cada vez más violentos y perturbadores, por lo que requerirán la ayuda de un sacerdote que intentará ayudarlos sin imaginar las consecuencias.
“Lo que a mí me aterraba era que no fuera un proceso como el de las películas pornográficas, que hubiera excusas para mostrar los momentos de miedo como ellos los usan para el sexo. Para mí era importante contar la historia con arcos dramáticos, sin caer en el drama ni el susto fácil”, comentó el cineasta.
Por su parte el actor Marco Zunino también dio su opinión sobre el género que se maneja, “es interesante que últimamente se ha hecho más cine de terror en Latinoamérica porque se cree más en el tema de posesiones, de embrujos y espíritus. En Estados Unidos hay una tendencia de un terror más real como de una persona loca que mata a todo el mundo”, dijo.
