El presidente de Volkswagen, Matthias Müller, prevé empezar a reparar los motores afectados por la manipulación de los gases el próximo mes de enero, tarea que se alargaría durante todo 2016. La canciller Angela Merkel respaldó ayer la respuesta que la empresa ha dado al mayor escándalo en sus casi 80 años de historia. “Hace falta claridad y transparencia; y tengo la impresión de que es lo que ha habido”, dijo Merkel en Estrasburgo, que rechazó las críticas a la empresa |
Servicios