Por el delito de "explotación de menores e incitarlos a la violencia", el gobierno de Puebla presentó una denuncia ante la Procuraduría General de la República contra padres de familia del municipio de Palmar de Bravo, luego de detectar 12 casos de infantes que estaban trabajando para personas dedicadas al robo de combustible.

El gobernador Antonio Gali Fayad dijo que la explotación de menores es un delito grave, ya que no solo los inician en la delincuencia, sino también coartan su libertad de estudiar y de vivir en plenitud.

"Definitivamente es un delito grave la explotación de menores, no solo los inician en la delincuencia, desgraciadamente hay familiares que los explotan para echarle aguas a los delincuentes. Alrededor de 12 casos tenemos identificados en Palmar de Bravo", comentó.

Del mismo modo, el gobernador poblano expuso que esta demanda ante autoridades federales, busca que el número de casos de menores explotados no incremente.

Respecto a las declaraciones del líder de la sección 23 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación, Alejandro Ariza en el sentido que docentes no quieren dar clases en los municipios que sufren robo de combustible, por temor a ser asesinados, el gobierno del estado indicó que ya ha solicitado a un grupo de pedagogos acudir a dichas zonas para ofrecer apoyo y se capaciten.

"Esa fue la idea de llevar a grupos de pedagogía y además el cuerpo militar también dan cursos. Lo estamos monitoreando y la SEP está muy pendiente de este caso", comentó.

En el tema es precisó mencionar que el líder de la sección 23, dijo que al menos 60 docentes han pedido su cambio de adscripción al tener temor que en dichos municipios sean violentados, pues ya ha ocurrido diversos robos, secuestros, y hasta la muerte de un maestro de la sección 51 en este año.

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