El gobernador de Puebla, Tony Gali, acudió este miércoles al municipio de Atzala, donde la caída del techo del templo de Santiago Apóstol mató a 12 personas que asistían a un bautizo.

También estuvo en Metepec, Atlixco, una de las zonas con más daños por el sismo del pasado martes.

En Atzala, en pleno corazón de la Mixteca poblana, Gali se sumó al velorio de las víctimas y rezó en su honor en compañía de los deudos, a quienes dio el pésame y ofreció todo el apoyo de su administración.

Al lado del gobernador estuvieron los secretarios General de Gobierno, Seguridad Pública y Desarrollo Social, Diódoro Carrasco, Jesús Morales y Gerardo Islas, respectivamente, a quienes comisionó para auxiliar a la población y para la reconstrucción de los inmuebles dañados, incluyendo el templo donde sucedió la tragedia y que resultó con pérdida total.

En Metepec se contabilizan al menos 30 casas que se desplomaron por completo y otras 320 con daños; muchas familias prefieren dormir en la calle ante el temor de un nuevo sismo.

De esa zona son 9 de las 43 personas que murieron en el estado de Puebla debido al temblor del pasado 19 de septiembre de 7.1 grados.