En lo que ha transcurrido del año se han documentado dos casos de jóvenes universitarios, que fueron privados de su libertad y asesinados por sus compañeros de clase, en ambos casos se tenía la intención de pedir y cobrar un rescate por su libertad, pero ninguno de los dos logró concretarse.

El caso más reciente es del joven José Andrés de Larrañaga Canalizo, de quien en las últimas horas se confirmó que su cadáver fue localizado en un paraje del municipio de Acajete, donde fue ocultado por tres de sus amigos que lo habrían privado de la libertad desde la noche del lunes.

José Andrés de 20 años de edad, quien era originario de Tuxtepec, Oaxaca, pero radicaba en Puebla y asistía a la Universidad de Ciencias y Desarrollo (UDES), fue reportado como desaparecido desde el 1 de octubre del presente.

De acuerdo a los primeros reportes, el joven fue secuestrado por tres compañeros de la escuela, quienes pedían por él 500 mil pesos, pero al no conseguirlo y ser identificados decidieron acabar con su vida.

En rueda de prensa, autoridades de la Fiscalía General del Estado (FGE) señalaron que el vehículo del occiso, un Toyota Lancer, de color rojo, fue ubicado en Acatzingo y eso permitió que horas después se pudiera ubicar el cuerpo inerte.

Cabe señalar que se mantiene abierta la investigación para deslindar responsabilidades de los presuntos culpables e incluso si hubiera más personas involucradas.

El otro caso que ocurrió este mismo año, fue el del joven Aldo Islas Todd, alumno de Contaduría de la BUAP quien fue asesinado el 17 de mayo dentro del motel Miño en la colonia Resurgimiento, por compañeros de la misma carrera.

De acuerdo con la Fiscalía de Secuestros y Delitos de Alto Impacto (FISDAI), Aldo Islas Todd fue llevado con engaños a dos moteles de la ciudad de Puebla el pasado 17 de mayo, hospedándose finalmente en el Motel Miño ubicado en la colonia Resurgimiento.

Presuntamente, ya adentro de las habitaciones, fue sometido para hablar con su familia y decirles que estaba secuestrado, pidiendo un rescate inicial de 750 mil pesos, sin embargo se presume que al momento de querer amagarlo, Aldo opuso resistencia y fue asfixiado por sus plagiarios.

Una vez que el viernes 18 de mayo se hizo público el hallazgo sin vida de Aldo en la habitación del citado motel, los secuestradores suspendieron las negociaciones del rescate con la familia de Aldo, por lo que la FISDAI logró seguir el rastro de los responsables hasta ubicarlos.