Yo soy de esas que agotan el tanque de la gasolina del auto hasta la última rayita, nada más para medir cuántos kilómetros recorrí y cersiorarme de que no me estén robando el preciado oro negro. Así que vivo con el alma en un hilo buscando una gasolinera de confianza en donde ‘me hagan la buena’ y los 50 litros que cargo religiosamente cada 10 días me rindan un par de kilómetros más.

Aclaro que no es porque ande con los pesos contados. No. Lo mío es una cuestión de agenda, de organización, de tiempo pues. Suelo ir a contra reloj a mis citas, entonces para mí es un desperdicio de al menos cinco o diez minutos el hacer una parada en la gasolinera. Por todo esto, cuando vi “Nosotros Los Nobles” yo sí le di mi voto de confianza a Javi Noble porque hubiera alguien que diera servicio a domicilio.

Obvio, sé que esta comodidad encarecería el servicio y el bolsillo de los mexicanos no puede más con gasolinazos y centavos que se han vuelto cientos de pesos más cada visita a la franquicia de Pemex.

Pero en el primer mundo, allá en Estados Unidos, la cosa es distinta, así que mientras aquí vemos como hay “escasez” por la ordeña a los ductos o mantenimiento a las bombas, nuestros vecinos ya ven hecho realidad esta idea de película. Se trata de Filld, una aplicación creada por Scott Hempy. El mecanismo consiste en clics, en la aplicación se introducen datos sobre el vehículo, la dirección y un horario en el que se pueda dar el servicio. Después de eso un camión se encarga de despacharte en tu ubicación.