Posts Tagged ‘literatura’

After Birdman

Lunes, Febrero 9th, 2015

Tres meses después de su estreno en México, todo mundo sigue hablando de Birdman. Aunque la película de Alejandro González Iñárritu llegó a las salas de cine en noviembre y se mantuvo en un par de discretas funciones, hoy, en la antesala del Oscar y en plena temporada de premios, ha recobrado fuerza.

Este lunes tomé el camión del aeropuerto de la Ciudad de México con destino a Puebla y me obsequiaron un ejemplar de la revista Oca, una excelente y entretenida guía de ocio, cultura y arte editada por el Instituto Municipal de Arte y Cultura de Puebla. En la edición de este febrero que ya corre como agua, encontré un exquisito texto de J. E. Becerra, quien abre una nueva sección en esta revista, bajo el título de El Escape, un espacio en el que 10 escritores poblanos nos llenan de ficción a través de relatos que se darán continuidad entre sí a manera de rompecabezas.

El autor del capítulo 1, J. E. Becerra, es ganador del XIV premio Filosofía y Letras de la BUAP (2014) en la categoría de cuento, y con el título “After Birdman”, nos regala una versión de lo que ocurrió después del shockeante final de la película que hoy tiene a Alejandro González Iñárritu y Emmanuel Lubezki, en los cuernos de la luna.

Aquí la reproducción completa que no tiene desperidicio y que seguramente deleitará a quienes ya vieron la película y conocen al reparto de la misma:

“Yo lo vi volar.” Emma tenía la mirada perdida. Sostenía el café en su mano temblorosa. “Se fue contento, dando vueltas alrededor de los edificios y riendo a carcajadas.” Sabía que esa pobre chica nunca iba a ser la misma. Lástima, tan bonita que era. Le di una cobija y salí con cuidado.

El psicólogo viene para acá, me dijo el jefe. En la otra sala están Edward y Alejandro. Hemos mandado helicópteros y nada, Michael sigue sin aparecer. Qué situación tan extraña y jodida es ésta ¿no? Hago una mueca y me dirijo al otro cuarto.

La familia del señor Keaton ha presentado cargos contra usted, Alejandro. ¿Seguro que no sabe lo que ocurrió? Él está con las manos en la cabeza, sus ojos fijos en el vacío y balbuceando “No sé lo que pudo pasar… eso no estaba en el libreto… ¿cómo pudo hacerlo?” Le pregunté si tenía un abogado. Alzó los hombros. ”Sí, lo llamaré.”

En la sala, Norton estaba inquieto sobre la silla. “¿Te lo imaginas?” Me dijo extasiado. “Siempre he querido volar, qué envidia. Si él puede hacerlo, también cualquiera puede.” No tenía caso hacerle preguntas. Me fui de ahí con una sensación incómoda en el estómago.

Al salir de la comisaría miré el cielo. Sin estrellas, sólo la luna brillaba, grande. También sentí algo de envidia, pero la envidia no sirve de nada cuando se quiere volar. La envidia fue uno de las causas de lo que pasó después. Aunque todos hubiéramos deseado que las cosas fueran diferentes. Emma fue recluida en una institución psiquiátrica. Pusieron un ventanal en el techo de su habitación porque tenía que dormir viendo el cielo raso. Alejandro está en la cárcel, le esperan cuatro juicios. Edward quiso volar desde la habitación de su hotel. Murió al caer en una cabina telefónica (…)

-J. E. Becerra

El Pancho Villa de Palou

Miércoles, Diciembre 10th, 2014

“El día que me iban a matar no puede decirse, entonces, que amaneció, porque para mí nunca anocheció del todo. Me pasé las horas oscuras de la madrugada cavilando ya no sobre mi suerte —carajo, si mi suerte estaba echada—, sino sobre los años transcurridos, las tantas aventuras, la pinche revolución, las mujeres que fui amando, los hijos que me dieron, los pocos amigos, los leales. Los muy jodidos traidores, siempre tantos”, con este fragmento del capítulo El sabor de la arena del desierto y la fotografía del típico “Se busca”, Pedro Ángel Palou invitó a sus amigos en Facebook a adentrarse a su más reciente libro: No me dejen morir así, recuerdos póstumos de Pancho Villa.

Pedro Ángel Palou nos tiene acostumbrados a sus novelas históricas sobre personajes claves de México. Este año nos presenta en su nueva obra literaria – contada en primera persona - la otra cara del famoso Pancho Villa, ese del que el dominio popular nos dice que tenía “sus dos viejas a la orilla”.

El propio Palou declaró la semana pasada en la Feria Internacional del Libro de Guadalajara (FIL) 2014, que Pancho Villa es un personaje que mintió tanto de sí mismo que nadie sabe realmente quién era.

Y es que para el escritor poblano, Doroteo Arango Arámbula, no era sólo un bravucón bonachon, parrandero y mujeriego que los libros o corridos se han encargado de hacer famoso. En la novela, Palou le presta carne y hueso al hombre de 45 años que - entre otras revelaciones producto de una exhaustiva investigación - habría sido un patriota preocupado por la educación, la salud y la calidad de vida, además de que rompe varios mitos, como el hecho de que habría sido asesinado por rencillas locales y no por órdenes de Álvaro Obregón, y luego decapitado por un par de borrachos que profanaron su tumba en busca de un trofeo y no por investigadores que querían estudiar su cerebro.

‘Las Batallas’ de Pacheco

Martes, Enero 28th, 2014

Quizá ‘Las Batallas en el Desierto’ sea el libro más leído y popularizado de José Emilio Pacheco, el escritor mexicano que pasó a mejor vida este 26 de Enero a los 74 años de edad. La historia de Carlitos cautivó a miles de jóvenes en los 80’s, cuando el amor tabú entre un niño y un adulto estaba en boca de todos.

Desde su muerte, registrada a las 18:20 horas en el Instituto Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición Salvador Zubirán, el mundo intelectual de México se declaró en luto. Durante las próximas 72 horas su nombre no dejó la lista de las tendencias en las redes sociales.

En internet circularon frases, fotografías, anécdotas de aquellos que recordaban la historia impresa de ‘Las Batallas’, de los que vieron la película ‘Mariana, Mariana’ (José Estrada, 1987), y de los que más recientemente escucharon la canción de Café Tacvba, inspirada en la obra de Pacheco:

“…Por alto que este el cielo en el mundo
por hondo que es el mar profundo
no habra una barrera en el mundo
que mi amor profundo no rompa por ti…”.

En el mar de información y recuerdos que circuló por internet, destacaron las 10 siguientes frases, cuya autoría se asignó a José Emilio Pacheco -integrante de la ‘Generación de los cincuentas’ - quien este lunes recibió un homenaje de cuerpo presente en el Colegio Nacional, encabezado por familia y el titular de la Secretaría de Educación Pública (SEP), Emilio Chuayfett.

1. El amor es una enfermedad en un mundo en que lo único natural es el odio.

2. No leemos a otros: nos leemos en ellos.

3. Digamos que no tiene comienzo el mar, empieza donde lo hallas por vez primera y te sale al encuentro por todas partes.

4. Los límites del lenguaje son los límites del pensamiento.

5. El arte ha muerto. Su fantasma está más vivo que nunca.

6. No hay amor sereno. Si lo hubiese, tampoco escaparía a su final tragedia que es la separación de los amantes.

7. Tal vez sólo me apropio los gestos, las palabras, los actos inherentes a la pequeña fracción de tiempo asignada a mi persona.

8. Que terrible es amar algo que la muerte puede tocar.

9. ¿Por qué tienen que pegarle etiquetas a todo? ¿Por qué no se dan cuenta de que uno simplemente se enamora de alguien? ¿Ustedes nunca se han enamorado de nadie?

10. Pero no estaba arrepentido ni me sentía culpable: querer a alguien no es pecado, el amor está bien, lo único demoníaco es el odio.

Finalmente, así es como se despidió a José Emilio Pacheco en las redes sociales:

Si México leyera…

Lunes, Abril 23rd, 2012
Durante todo el lunes observaba en Twitter el hashtag #SiMéxicoLeyera. Me van a disculpar pero las oraciones compartidas por los usuarios me resultaron absurdas. No es que yo menosprecie el valor de un libro, pero sí soy realista y creo que los libros no son varitas mágicas que curarán los males de una sociedad descompuesta por muchos otros factores que nada tienen que ver con la falta del hábito de la lectura por parte de su población.
“Tendríamos mejores candidatos”, “No existirían ni Televisa ni Tv Azteca”, “No seríamos un pueblo que se deja manejar”, “Podríamos ser de primer mundo”, “Peña Nieto no tendría tantos seguidores”, “Ya habrían hecho algo en contra del gobierno”… todas estas son algunas de las respuestas que, supongo, “los devoradores de libros” escribieron en la red social.
Yo leo desde mi infancia autista. Debo confesar que cada vez lo hago menos. Pretextos sobran: el tiempo, el trabajo, la apretada agenda, las fiestas, el cansancio, en fin… En el marco del Día Internacional del Libro, que fue ayer pero que, como todos, deberían recordarse todos los días, valdría la pena ser un poco sinceros con nosotros mismos y por consiguiente con el resto del mundo.
El hecho de que en México se lean 2.8 libros al año por persona (en promedio, según datos de 2011 de la OCDE y la UNESCO) sigue dando pena ajena pero convendría dejar de ver sólo la paja en el ojo ajeno y asumir nuestra responsabilidad. Despedazaron a Enrique Peña Nieto porque no logró nombrar tres libros que le marcaron su vida pero ojalá aquellos que se burlaron nos contaran no sólo el nombre sino el prólogo de algún escrito.
Sí es vergonzoso que quien quiere ser nuestro presidente no sea un erudito literario pero es más vergonzoso que de dientes para afuera critiquemos y no hagamos algo por visitar una biblioteca, a la cual el 40 por ciento de la población mexicana no se ha acercado nunca en su vida, según datos de la misma OCDE.
Yo leo no para ser una mejor persona, no porque quiero ser presidenta, no porque crea que el mundo se convertirá en un cuento de hadas y mucho menos para presumir lo culta que soy.  Sólo leo porque las historias me atrapan, porque despejan mi mente, porque aprendo nuevas visiones de la vida, porque conozco cosas nuevas de la historia, del ser humano y porque tengo una adicción por las letras que tejen mundos surrealistas.

Gabo

Lunes, Marzo 5th, 2012

Era una adolescente cuando buscando algo que leer en los libreros de mi papá encontré los 12 cuentos peregrinos de Gabriel García Márquez. Desde entonces me volví fan de este escritor colombiano que hoy llega a los 85 años en medio de una serie de homenajes por todo el mundo y del lanzamiento digital de su célebre obra “Cien Años de Soledad”.

Fue el 4 de octubre de 2005, cuando la Universidad de las Américas Puebla nos informó a través de un comunicado de prensa que el literato había recorrido los jardines de esa casa de estudios al lado del entonces rector, Pedro Ángel Palou García. Tal encuentro privado pareció más bien un capricho o un lujo que se dio el también escritor poblano y que no quiso convidar con los seguidores de este Premio Nobel de la Literatura.

Cuatro años después, en octubre de 2009, el nombre de este famoso escritor resonó en el escenario local cuando hubo la intención de rodar en Puebla un filme basado en la novela “Memoria de mis putas tristes”, sin embargo, el gobierno marinista se negó a apoyar financieramente el proyecto para no hacer más grande el escándalo que hundió a Mario Marín Torres por apoyar a empresarios vinculados con redes pederastas. Aunque no tenía nada que ver una cosa con otra, grupos extremistas alegaban que la obra promovía las redes de prostitución.

Finalmente, en octubre pasado (el de 2011), cuando el premio Nobel de la Paz, Oscar Arias visitó la ciudad, el presidente del Colegio de Puebla, Miguel Ángel Pérez Maldonado, soltó a la prensa que “andaban trabajando” en el acercamiento con los literatos Gabriel García Márquez y Mario Vargas Llosa para que compartieran sus anécdotas con los poblanos.

Total que entre que vemos pasarlo lejos de aquí, nos quedamos con las letras del buen “Gabo”, aquí algunas de sus mejores frases:

1. “No hay nada más difícil, más estéril y empobrecedor que la logística de la casa”
2. “El problema del matrimonio es que se acaba todas las noches después de hacer el amor…”
3. “La vida no es la que uno vivió, sino la que uno recuerda, y cómo la recuerda para contarla”
4. “La peor forma de extrañar a alguien es estar sentado a su lado y saber que nunca lo podrás tener”
5. “La grabadora oye pero no escucha, repite pero no piensa, es fiel pero no tiene corazón”
6. “Hay que ser infiel, pero nunca desleal”
7. “Recordar es fácil para el que tiene memoria, olvidarse es difícil para quien tiene corazón”
8. “Hasta Dios se va de vacaciones en agosto”
9. “El escritor escribe su libro para explicarse a sí mismo lo que no se puede explicar”
10. “Ningún lugar en la vida es más triste que una cama vacía”