Alguna vez, en mi infancia lejana, quise ser una niña exploradora, es decir una gacela. Creo me emocionaba más ponerme la faldita short y la pañoleta, escalar montañas y prender fogatas que toda la filosofía del escultismo que en esa época desconocía. Por mil y un pretextos no fui scout, pero mi hermano sí.

Fue hasta que me involucré amorosamente con un apuesto joven que descubrí toda la mística que encierra la filosofía de vida que dejo como legado Lord Robert Stephenson Smith Baden-Powell of Gilwell, quien este 8 de enero protagonizó en Twitter el hashtag #72añossinBP.

Actualmente el movimiento, nacido en 1908, alberga a millones de niños, niñas, jóvenes, jovencitas y adultos en todo el mundo. Fue en su infancia cuando BP desarrolló su habilidad para trepar a los árboles, navegar y explorar. A continuación algunas de sus frases célebres que hoy contribuyen a formar mejores generaciones:

“Dando una patada a la sílaba IM de la palabra IMPOSIBLE, cualquier persona estará seguro de salir adelante.”

“El hombre no es más que un proyecto y la vida una especie de barco que cada uno tiene que llevar a buen puerto.”

“El niño no aprende lo que los mayores dicen, sino lo que ellos hacen.”

“Jamás se fracasa tratando de cumplir con el deber, y sí cuando se descuida.”

“La felicidad no se consigue sentándose a esperarla.”

“La mejor forma de vencer las dificultades es atacándolas con una magnífica sonrisa.”

“La felicidad se apoya en dos pilares fundamentales: tomar la vida como un juego y prodigar amor a los demás.”

“La religión es una cosa bien sencilla: primero, amar y servir a Dios, segundo amar y servir al prójimo.”

“La verdadera manera de obtener la felicidad, es haciendo felices a los demás.”

“Los hombres se convierten en caballeros por el contacto con la naturaleza.”

“Mientras viváis en este mundo, tratad de hacer algo bueno que perdure después de vuestra muerte.”

“No te conformes con el qué, sino que logra saber el porqué y el cómo.”

“Nuestro método de formación es educar desde dentro, en lugar de instruir desde fuera: ofrecer juegos y actividades que además resulten atractivos para el muchacho, lo eduquen seriamente en el aspecto moral, mental y físico.”

“Si la vida fuera siempre fácil, sería insípida.”

“Si tenéis el hábito de tomar las cosas con alegría, rara vez os encontraréis en circunstancias difíciles.”

“Un hombre que nunca cometió errores, nunca hizo nada.”

“Una sonrisa es la llave secreta que abre muchos corazones.”

“Si no vives para servir no sirves para vivir.”

Quien no se haya conmovido con la historia de Eli y Carl en la cinta de Disney Pixar, Up, es porque no tiene corazón o nunca ha amado. Además del simpático, tierno y regordete scout llamado Rusell, la película animada ganadora de dos premios Oscar en 2010, logra envolvernos en aquellos que aún creemos en que todos los sueños se pueden hacer realidad, como fue el caso del adulto mayor que, con tal de cumplir su promesa a su difunta esposa, eleva con globos de gas su hogar y se lanza a una aventura al Amazonas.

Sirva todo este preámbulo para compartir que resulta que una pareja de California, Estados Unidos, cumplió uno de sus sueños y compró una réplica de la casa de la película producida por Disney Pixar a cambio de la módica cantidad de 400 mil dólares, algo así como 5 millones 200 mil pesos. La mudanza está programada para el 4 de enero.

De acuerdo con las noticias, Lynette y Clinton Hamblin hicieron realidad su fantasía de vivir en una versión real de la casa de Up. “Cuando nos enteramos de eso durante el verano, pensamos, ‘oh, probablemente sea una casa que cueste varios millones (de dólares)… No pensábamos que la podríamos pagar. Así que cuando todo se dio (…) fue un sueño hecho realidad”, declaró la pareja a la estación KSL de Salt Lake City.

Por si aún alguien no ha visto esta hermosa historia, les pasamos la sinopsis general: Se trata de un hombre de 78 años que después de atar globos a su casa multicolores, viaja con ella a la selva en Sudamérica con un compañero inesperado 70 años menor que él. Lo anterior después de una reseña muy emotiva en la que en un abrir y cerrar de ojos pasa sus días desde pequeño hasta la plenitud acompañado de su esposa Eli.

Up, fue la primera cinta que los Hamblin vieron con su hija. Y es que, también la pareja había tenido dificultades para tener hijos, cuestión que también los identifica con algunas de las luchas que el septuagenario de la película y su esposa enfrentan al principio de la historia.