Archive for January, 2013

Preliberaciones de reos: un mismo modus operandi

Monday, January 28th, 2013

No fueron dos ni tres, sino por lo menos 30 los reos a los cuales el secretario de Gobernación de Mario Marín, Valentín Meneses Rojas, autorizó su liberación anticipada al margen de la Ley de Ejecución de Sanciones Privativas de la Libertad del estado de Puebla.

Ayer documentamos que tres internos de los Ceresos lograron salir de la cárcel a pesar de haber sido sentenciados por delitos considerados graves: secuestro, violación equiparada y homicidio calificado.

Ninguno de ellos tenía derecho a ningún beneficio y hoy deberían seguir tras las rejas pagando sus respectivas condenas de 22 años, 19 años y de 14 años y cuatro meses de prisión, respectivamente.

Como ha dicho el procurador Víctor Carrancá Bourget, funcionarios de la Secretaría de Gobernación vendieron las preliberaciones, como parte de una trama corrupta de grandes dimensiones.

¿Cuánto recibieron los marinistas, con Valentín Meneses a la cabeza, para regresar a las calles a quienes secuestraron, violaron y asesinaron y que a pesar de haber sido condenados por un juez, no cumplieron toda su sentencia?

Fuentes cercanas a las investigaciones de la PGJ hablan de varios millones de pesos; una cifra, dicen, que espantaría a cualquiera.

Hay, empero, un dato revelador que no debe –ni puede- perderse de vista: el momento en que el hombre de todas las confianzas del góber precioso firmó los acuerdos que permitieron la liberación de una treintena de reos acusados de cometer delitos graves.

Veamos dos nuevos casos:

El primero es el del reo Domingo Máximo Méndez, sentenciado a 16 años y seis meses de prisión por el delito grave de violación calificada; por lo tanto, no tenía derecho a ningún beneficio de acuerdo con el artículo 54 bis de la Ley de Ejecución de Sanciones Privativas de la Libertad.

Pese a ello, el secretario de Gobernación, Valentín Meneses Rojas, le concedió el 14 de enero de 2011 el beneficio de tratamiento preliberacional, saliendo de la cárcel el 18 de enero de 2011, faltándole por compurgar dos años y 14 días.

Es decir: el violador Domingo Máximo Méndez recobró su libertad apenas 13 días antes del fin del gobierno de Mario Marín y del inicio de la administración de Rafael Moreno Valle.

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El patrón –tenían prisa, sin duda- se repite en el segundo de los casos: el del interno Carlos Madrid García, sentenciado a 13 años de prisión en segunda instancia por el delito grave de homicidio simple intencional.

A él se le concedió el beneficio de la libertad preparatoria el 20 de enero de 2011, saliendo de prisión al día siguiente (21 de enero de 2011), faltándole por compurgar siete años, ocho meses y 19 días.

Esto es: el asesino Carlos Madrid García dejó el Cereso apenas 10 días antes del arranque del sexenio morenovallista.

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¿Una casualidad?

De ninguna manera.

Tal es el modus operandi en el resto de las preliberaciones –o indultos- autorizados por el secretario de Gobernación de Mario Marín.

Todas, absolutamente todas se hicieron en los últimos días de la pasada administración.

Y con una celeridad inusitada, impropia tratándose de asuntos de esa delicadeza, en una acción sincronizada que recuerda a la realizada por los funcionarios del panista Felipe Calderón que otorgaron dos permisos para operar casi 100 casinos en los últimos segundos del pasado gobierno federal.

Las preliberaciones se concretaron, sí, en los días previos a la toma de posesión de Rafael Moreno Valle, justo en ese preciso momento en el que el régimen que se iba no se terminaba de ir y el que llegaba no acababa de llegar.

Hoy se sabe, con documentos en las manos, que todo se operó desde la oficina del secretario de Gobernación.

Aunque eso sí: Valentín Meneses Rojas –quien se dice inocente: lo mismo decía cuando defendió a su jefe de las agresiones a los derechos humanos de la periodista Lydia Cacho- no es el único involucrado en la cloaca.

Y es que la PGJ sigue una línea de investigación en torno a otros dos personajes que tomaron parte en la trama de corrupción.

Uno de ellos es Indalecio Cuesta Torres, presunto primo del ex gobernador Mario Marín Torres y quien se desempeñó como director de Ejecución de Sentencias de la Secretaría de Gobernación.

El caso es un verdadero escándalo y dará para más, mucho más. Inevitablemente.

gar_pro@hotmail.com

Valentín Meneses: ¿Es su Firma pero no es su Firma?

Monday, January 28th, 2013

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Un secuestrador, un violador y un homicida salieron de la cárcel a finales del sexenio pasado.

No es que hayan cumplido la condena que recibieron por parte de un juez.

Simplemente pagaron cantidades millonarias a funcionarios de un gobierno, el de Mario Marín, que torcieron la ley y -sin ningún escrúpulo ni respeto por las víctimas-  les regresaron su libertad de forma anticipada.

Hoy se sabe, gracias a una serie de documentos en poder de Puebla On Line, que los reos están en la calle gracias a que el secretario de Gobernación del góber precioso, Valentín Meneses Rojas, firmó de puño y letra los acuerdos que así lo hicieron posible.

Fue entre diciembre de 2010 y enero de 2011 –días antes del arribo al poder del hoy gobernador Rafael Moreno Valle- que en la dependencia a cargo del compadre de Mario Marín se dio luz verde a una trama de corrupción que hoy es objeto de una muy seria investigación por parte de la PGJ del estado de Puebla.

Al menos tres reos que cometieron delitos considerados graves, y que por lo tanto no alcanzaban el beneficio de tratamiento preliberacional, dejaron el Cereso sin ningún problema.

A José Faustino Pérez Rojas, sentenciado a 19 años de prisión por violación equiparada, le concedió el 22 de diciembre de 2010 el beneficio de tratamiento preliberacional, saliendo de prisión un día después, el 23 de diciembre de 2010, faltándole por compurgar tres años, seis meses y dos días.

En tanto, a Desiderio Jiménez Viveros, sentenciado a 22 años de prisión por secuestro, le concedió el 14 de enero de 2011 el beneficio de tratamiento preliberacional, saliendo de prisión el 27 de enero de 2011 –cinco días antes del inicio del gobierno morenovallista-, faltándole por compurgar nueve años, 11 meses y nueve días.

De la misma forma, a José Luis Pérez Calderón, sentenciado a 14 años y 4 meses de prisión por homicidio calificado, le concedió el 5 de enero de 2011 el beneficio de libertad preparatoria, saliendo de prisión el 6 de enero de 2011, faltándole por compurgar siete años, seis meses y nueve días.

En los tres casos el funcionario que autorizó fue Valentín Meneses Rojas, el hombre más cercano a Marín, quien durante su sexenio lo hizo prácticamente todo: director de Comunicación Social, director del DIF estatal, presidente del PRI, secretario de Comunicaciones y Transportes, secretario de Gobernación y notario público número 28 de Puebla capital.

A la fecha, según ha confirmado el procurador Víctor Carrancá Bourget, hay dos averiguaciones previas abiertas y dos órdenes de aprehensión liberadas en contra de dos ex funcionarios que estaban en la entonces Secretaría de Gobernación por la compra-venta de preliberaciones a internos de los diversos penales del estado.

Pero es hasta hoy que se sabe que quien estuvo detrás de todo fue, en realidad, Meneses Rojas.

El mismo que apenas el pasado jueves le dijo a E-Consulta (el primer medio que habló desde marzo de 2011 del tráfico de preliberaciones bajo el régimen marinista) que sí, efecto, se otorgó ese beneficio pero sólo a indígenas, personas de la tercera edad y enfermos, incluso de SIDA, que había cumplido más del 75% de su condena.

“El principal requisito que pidió el gobernador (Mario Marín) fue que no se tratara de delitos graves como secuestro, homicidio o violación”, agregó.

Pero como puede verse, el ex secretario de Gobernación mintió. Con premeditación, alevosía y ventaja.

Y es que los documentos son claros. Y no dejan lugar a dudas.

A menos que para intentar salvarse, Valentín Meneses recicle el famoso “Es mi voz pero no es mi voz” (tan célebre en el contexto del caso Lydia Cacho-Marín) con un “Es mi firma pero no es mi firma”.

¿Se atreverá?

***

PUEBLA, Pue., 03 septiembre 2010.- Valentín Meneses Rojas, secr

Que nadie se extrañe si a partir de ahora, ante la contundencia de las evidencias, la Procuraduría General de Justicia anuncia la conclusión de las investigaciones, da a conocer los nombres de todos, absolutamente todos los responsables, el número exacto de preliberaciones otorgadas y los montos que los marinistas cobraron.

Tampoco que nadie se sorprenda si por fin se sabe cuánto pagó Valentín Meneses Rojas a Carlos Trujillo López por hacerse de la notaría 28, en medio de un proceso administrativo viciado de origen y en el que el entonces secretario de Gobernación fue juez y parte.

¿Acaso un millón de dólares?

Ojalá que el compadre de Marín tenga un muy buen abogado.

gar_pro@hotmail.com

Habemus Secretaria Particular (El Regreso de Mercedes Aguilar)

Thursday, January 24th, 2013

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Se empieza mover el gabinete morenovallista.

Y es que fue hace unas cuantas horas que se concretó el primero de una serie de movimientos esperados.

María Mercedes Aguilar López presentó su renuncia a la delegación de CAPUFE –que apenas la pasada semana le había renovado el contrato- para asumir la Secretaría Particular de Rafael Moreno Valle, una posición tan estratégica como delicada.

Para sustituir a José Lugo Guerrero –quien dejó el puesto por razones personales-, el gobernador no experimenta: va a lo seguro. La lealtad y la eficiencia de la nueva funcionaria están fuera de toda duda.

Si hay alguien que se la ha jugado con Moreno Valle desde el principio, incluso cuando nadie apostaba por él, esa es Mercedes Aguilar, quien lo acompaña desde los tiempos de la extinta Secretaría de Finanzas y Desarrollo Social del gobierno melquiadista, y luego en el Congreso del estado y en las campañas para el Senado y la gubernatura.

Siempre llevándole la agenda, coordinando sus actividades, ajustando los tiempos, sabiendo guardar secretos

Ella empezó el actual sexenio con una doble función: secretaria particular y encargada de despacho de la Secretaría de Cultura, que luego se convertiría en Consejo Estatal para la Cultura y las Artes de Puebla.

Posteriormente fue habilitada como directora del ICATEP (Instituto de Capacitación para el Trabajo del Estado de Puebla), posición que abandonaría unos cuantos meses después para asumir la delegación de Caminos y Puentes Federales, una de las delegaciones más disputadas y donde hizo una labor callada pero importantísima, siempre jugando para el mismo equipo: el equipo morenovallista.

Y es que dejó listo el proyecto para iniciar la ampliación de la autopista Puebla-DF, pagando a todos los ejidatarios afectados; consiguió el derecho de vía para la ampliación de la caseta de Texmelucan; logró que se concluyera la eterna obra de concreto en el tramo Amozoc a Esperanza, y puso su parte para la concreción de los distribuidores Zaragoza y a Santa Ana Chiautempan, entre otras acciones.

Hoy, ante nuevas circunstancias, Mercedes Aguilar regresa al origen.

De hecho, las fuentes aseguran que desde este jueves empezó a despachar en la Particular del gobernador de Puebla.

El mismo que sí, cómo no, mueve sus piezas y aceita sus estructuras con la gente de toda su confianza.

Y es que él también se prepara para la guerra.

Una guerra electoral que por lo que se ve será dura, cruenta…

A matar o morir.

gar_pro@hotmail.com