¿QUIÉN ES YUNÚEN LIMA Y QUÉ TIENE QUE VER CON EL SAQUEO A CASA PUEBLA?

8-gar

Hete aquí, ante ustedes, el (ni tan misterioso) triángulo entre (¿el prófugo?) Eduardo Tovilla, Raúl Egremy Palomeque y una mujer con largo historial de nombre Yunúen Lima Aguilar.

Eduardo Tovilla Lara fue sin duda uno de los operadores financieros más cercanos y consentidos del extinto Rafael Moreno Valle.

A su paso por la administración pública se hizo de una fortuna verdaderamente escandalosa.

Su casa en Atlixco, con cancha de basquetbol con las normas y elementos de la NBA, es célebre en cierto círculo social.

Depositario de no pocos secretos del régimen que murió el 24 de diciembre de 2018, Tovilla se encuentra actualmente -según todas las evidencias- en Canadá, temeroso cada hora, cada minuto de su vida de que la acción de la justicia -ésa que se ha activado con firmeza en el gobierno de Miguel Barbosa Huerta- finalmente lo alcance.

Fue subsecretario de Egresos con RMV y aprovechándose de su muy cercana relación con éste, siempre tuvo manga ancha para llevar a cabo toda clase de operaciones financieras al amparo del poder, que le dejaron enooooormes dividendos.

Pieza clave en su entramado fue siempre Raúl Egremy Palomeque, su director de Presupuesto, un verdadero sinvergüenza que todo el tiempo presionó a presidentes y directores de obra municipales para adjudicar obras a constructoras de la propia familia ¡Egremy Palomeque!

La operadora de Egremy Palomeque fue la citada Yunúen Lima Aguilar, ni más ni menos que su cuñada -sí, cuñadaza- y directamente relacionada con el presunto saqueo a Casa Puebla, caso que ya tiene a una persona en la cárcel: el tiktokero Bernardo Fernández, para más señas: “sobrino” de Tony Gali y protegido de Fernando Manzanilla, el ex secretario de Gobierno hoy en el limbo político por mérito propio.

Doña Yunúen entraba y salía de la oficina de Tovilla y operó en su momento el traslado de bienes de Casa Puebla a La Vista.

En poder del reportero consta copia de la denuncia penal en la que, además de Bernardo Fernández -hoy huésped del penal de San Miguel–, aparece señalada Yunúen Lima Aguilar, acreditada como “administradora de Casa Puebla” (sic) ante el notario público 52, además de un tal Rodrigo Javier Leal Salvatori, “representante designado” para llevar a cabo el conocido traslado de los bienes que se encontraban en el famoso inmueble de la Calzada de Los Fuertes número 110 de la zona histórica de Los Fuertes.

En el morenovallismo todo mundo sabe que Tovilla y Raúl Egremy viajaban con mucha frecuencia a la Riviera Maya, Nueva York, Woodlands Texas y Miami, en vuelos privados que salían de Huejotzingo, con fuertes cantidades de dinero en efectivo producto de todos los “moches” que les dejaban sus “operaciones financieras” desde el poder.

Eran escandalosos los periplos a todo lujo de estos personajes.

En el caso de Tovilla, en un segundo pasó del infierno de la pobreza al cielo de la riqueza: de vivir en modestos departamentos pasó a habitar una residencia de varios millones de dólares en La Vista Country Club.

Mismo caso de Raúl Egremy, alias “El Cojo”, propietario de una lujosa propiedad en el condominio Punta Alta y de un “depa” en Acapulco, donde logró atesorar una colección de arte valuada en cerca de 400 millones de pesos, que ya la quisiera la familia Slim, la del Soumaya.

Por cierto, para más señas de estos impunes: Raúl Egremy Palomeque es familiar cercano de Óscar Chapa Palomeque, oficial mayor de la SEP y quien fuera aprehendido por el millonario desfalco con la adquisición de uniformes escolares, fallecido en circunstancias misteriosas en el Cereso de Puebla; seguramente sabía demasiado.

El caso es que si Bernardo Fernández está preso por el saqueo a Casa Puebla, ¿por qué no ha corrido la misma suerte Yunúen Lima Aguilar? y ¿por qué Tovilla y Raúl Egremy se siguen burlando de la Fiscalía General de Justicia?

En tiempos en que la tendencia del gobierno de Miguel Barbosa Huerta, como aquí se ha dicho, es cero impunidad para quienes han violado la ley y abusado del poder en el pasado y en el presente, ambas preguntas no son para nada ociosas.

gar_pro@hotmail.com

Leave a Reply

You must be logged in to post a comment.