Emilio García Riera, en su libro Breve historia del cine mexicano (1897-1997), explica que México fue uno de los primeros países que conoció el cinematógrafo, luego de que el 28 de diciembre de 1895, el Cinématographe Lumère iniciara sus exhibiciones en el Grand Café (Boulevard des Capucines),en Francia.
Ocho meses después, el 6 de agosto de 1896, el presidente Porfirio Díaz, su familia y miembros de su gabinete presenciaron en una función privada dentro de un salón del Castillo de Chapultepec, las primeras películas filmadas por los hermanos Louis y Auguste Lumière.
Más tarde, el 14 de agosto de 1896, se realizó la primera proyección pública de cine en nuestro país, exactamente en el sótano de la droguería “Plateros”, ubicada en el número 9 de la calle Plateros, hoy Madero, de la Ciudad de México.
Ese día, los asistentes –entre los que se encontraban periodistas e intelectuales– pudieron disfrutar vistas de menos de un minuto filmadas por los hermanos Lumière, como La llegada del tren y la Salida de los obreros de la fábrica, que mostraba a un grupo de empleados saliendo de su trabajo.
Con carteles distribuidos en toda la ciudad, se anunció la primera función para el público en general: el 15 de agosto de 1896. El precio del boleto de las primeras funciones era de 50 centavos, aunque se crearon funciones de $1 peso los aristócratas.
Entre las primeras crónicas de la época, destaca la del escritor mexicano Luis G. Urbina, quien comentó sobre La llegada del tren lo siguiente: “La escena es tan natural que hasta parece percibirse el ruido del tren y el murmullo de los pasajeros”.
Claudio Fernando Bon Bernard y Gabriel Veyre fueron los enviados a México, en representación de los hermanos Lumière, para mostrar el cinematógrafo al general Porfirio Díaz, quien maravillado con el invento francés, autorizó a los emisarios la realización de unas 26 películas.
Entre las primeras vistas producidas en nuestro país se encuentra el presidente Porfirio Díaz montando a caballo por el bosque de Chapultepec. De acuerdo a García Riera, los franceses filmaron al presidente en diversas circunstancias: en carruaje, con sus ministros, en desfiles y otras actividades en las que participaba.
El 25 de agosto, en el Castillo de Chapultepec, se proyectaron las filmaciones hechas a Porfirio Díaz, vistas que fueron incluidas en las funciones que se reanudaron en la droguería “Plateros” hasta fin de año, cuando Bon Bernard y Veyre partieron hacia América del sur para seguir promoviendo el cinematógrafo.
Desde 1996 se realiza una función especial para conmemorar el centenario de la llegada del cine a México. La proyección se lleva a cabo en el Castillo de Chapultepec con las vistas de los hermanos Lumiére.
Fuente: http://www.imcine.gob.mx
