Fernando Maldonado
Se comienzan a divisar los saldos de las campañas de la segunda mitad del año en Puebla. La probable falta de recaudación por concepto de pago de tenencia vehicular a partir del periodo fiscal de 2011, desde el primer minuto de ese periodo.
La eliminación de este gravamen impuesto desde 1968 en México, se convirtió en uno de los argumentos que más encendió el debate político durante el periodo de búsqueda de votos, con el propósito de la renovación de los poderes públicos en la entidad.
Desde la amalgama de los partidos políticos coaligados en la oposición estaba aún en el horizonte la incertidumbre por el resultado de los comicios, que ya todos conocemos. Iniciaron una feroz andana en contra de la iniciativa enviada al Congreso del Estado por el ex abanderado del PRI, Javier López Zavala.
Incluso ya mucho antes, con información consistente en los cuartos de guerra de los personajes en contienda, el PAN decidió salir a volantear para sugerir a los propietarios de vehículos abstenerse de pagar el impuesto vehicular.
Fue el propio dirigente del PAN, Juan Carlos Mondragón Quintana quien distribuyó panfletos en los principales cruceros de la capital para alentar el incumplimiento del pago respectivo. Era el 9 de febrero apenas y ya la pasión política fluía.
Hábiles desde la oposición, hoy sabrán que el costo de la contra campaña podría traer consecuencias en términos de recaudación que no solo significa la pérdida de unos 400 millones de pesos por ese solo concepto, sino el castigo desde la federación por la disminución recaudatoria.
La Secretaría de Hacienda y Crédito Público premia o castiga, según sea el caso. El programa general de participaciones federales a los estados se entrega en función del nivel de la recaudación en cada entidad. A menores ingresos propios, se reduce el monto del dinero enviado desde la federación.
Es en esa lógica que el próximo secretario de Finanzas, Cuauhtémoc Sánchez Osio entendió la complejidad del tema y “por encima de la polarización ideológica”, expresión acuñada por él mismo durante el debate nacional por el destino de la industria petrolera, palomeó la estrategia del equipo de Finanzas.
Validó la estrategia de persuasión que echó a andar la administración saliente, de la que paradójicamente será benefactora la que viene. Nadie sabe para quien trabaja.
En el sótano…
Durante dos días sesionará la Conferencia Nacional de Gobernadores en Veracruz. Ayer inició el trabajo en comisiones y hoy se realiza la plenaria con la casi totalidad de mandatarios que integran esta instancia de interlocución con el poder federal.
No debe extrañar un pronunciamiento ante los hechos que costaron la vida al ex gobernador de Colima, Silverio Cavazos Ceballos el domingo pasado.
Deficitaria la realización de los foros ciudadanos de consulta pública de Compromiso por Puebla. Errores de logística, agenda y hasta el soslayo del gobernador electo, Rafael Moreno Valle hacen evidente que el organizador carece de capacidad para el encargo.
Si quiere encontrarlo, solo tiene que marcar el número telefónico de la sección 23 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación, Eric Lara Martínez. Es él.
Quien operó la reunión al dirigente estatal del PRI, Juan Calos Lastiri Quiroz con la líder nacional Beatriz Paredes Rangel, lo hizo quedar mal, o traía consigna. Consejeros políticos identificados por sus críticas al ex abanderado Javier López Zavala fueron marginados del encuentro del fin de semana pasado y el enojo es evidente, notorio.
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