Cadáver fue ubicado flotando en las aguas del río Atoyac, a la altura de Las Carmelitas.
De acuerdo a los hechos, el cuerpo inerte presentaba un avanzado estado de descomposición, por lo que no se pudieron observar si tenía lesiones de arma de fuego o golpes.
Las autoridades iniciaron el rescate del cadáver y finalmente lo llevaron al anfiteatro a la espera de los estudios correspondientes, así como de la identificación correspondiente.