Después de 19 días de espera, por fin pude ver Miss Bala. Sabía que era una película cruda y estaba preparada para todo lo que podría pasar frente a mis ojos: sangre, narcotráfico, balazos, corrupción y miseria.

Después de ver la historia de Laura Guerrero, salí deprimida de la sala de cine. La sensación de tristeza y miedo me duró un par de horas. Tristeza por el hecho de que lo que aparece en la pantalla grande no es un cuento que un guionista creativo imaginó que ocurría en algún lugar lejano sino porque es la realidad. Las balaceras y las redes de corrupción que se tejen en medio de la disputa por el poder y el control de la droga es el pan nuestro de cada día en ya muchos estados de la República Mexicana.

Miedo. El miedo de pensar qué es lo que va a seguir nada más no se me termina de pasar. Escuchar las historias de terror en las calles que se vive en otros estados, me lleva a pensar ¿Y en Puebla… cuánto falta para que eso ocurra?. Y es que hay que reconocer que como bien dicen las autoridades hasta ahora sólo tenemos “hechos aislados” y en nuestra entidad priva “un estado de paz y tranquilidad”… ahora sí que como dice el dicho… “En tierra de ciegos… el tuerto es rey”.

Mientras que con “El Infierno”, otro largometraje de narcotráfico y corrupción mexicana, uno no para de reír en las salas de cine (por absurdo y paradójico que resulte), con Miss Bala te mantienes agarrada a la butaca a la espera de cualquier tragedia. Me resulta interesante como un mismo tema puede ser abordado desde dos perspectivas diferentes pero al final dejan el mismo sabor de boca cuando al espectador le cae el veinte de que se trata de la vil y pura realidad.

Por lo que toca a la “narcobelleza”, vale la pena recordar que el guión de la película comenzó a gestarse en diciembre de 2008, cuando el director, Gerardo Naranjo leyó sobre la captura de Laura Zúñiga, ex Nuestra Belleza Sinaloa, a quien se acusó de participar en una banda de presuntos narcotraficantes. En ese entonces, la joven (al igual que la protagonista de la cinta) fue presentada por las autoridades mexicanas como cómplice de un líder del Cartel de Sinaloa, pero días después un juez determinó que las acusaciones eran falsas.

“Todos los personajes, vivos o muertos, que aparecen en la historia son ficticios, cualquier parecido con la realidad es mera coincidencia”, rezaba una leyenda al final de los créditos de la cinta producida por Pablo Cruz, Gael García y Diego Luna. Miss Bala, sin duda es una cinta de referencia obligada para todos aquellos que aún creen que el norte de México queda muy lejos y que la guerra entre cárteles y el ejército se limita a espeluznantes cifras. Aún sigue en cines.

No es que yo sea una insensible pero debo confesar que a la fecha no comprendo el duelo mundial que algunos han decretado tras la muerte de Steve Jobs, cofundador de Apple. Sí entiendo la importancia del personaje y su aportación a la empresa de la manzanita mordida. También comprendo la lamentable enfermedad (cáncer pancreático) que le aquejó y terminó con sus días a los 56 años.

Resulta que este miércoles Apple cerrará sus tiendas al menudeo por varias horas para que los empleados puedan ver la transmisión de un homenaje a la vida de su cofundador que se llevará a cabo a las 10:00 de la mañana en las oficinas generales de Apple en Cupertino, California.

En las redes sociales, he visto publicarse centenas de condolencias porque Steve Jobs pasó a mejor vida. Sin duda, los más afectados han resultado los adolescentes y el público geek que lo llegaron a idolatrar porque sin él tal vez su vida sería muy “aburrida” al no contar con un iPhone, una iPad o el popular  iPod.

Y es que en la era digital, hasta las condolencias se han revolucionado. No es necesario viajar hasta el lugar del funeral, mucho menos dar un abrazo fraterno a los familiares. Hoy la realidad virtual ha hecho posible que la intimidad sea un concepto en vías de extinción.

Un reporte de CNN Expansión indica que investigadores de la Universidad de Illinois estudiaron en 2010 cómo las personas usan internet para el duelo. Después de un tiroteo en un campus de Estados Unidos, los estudiantes cambiaron sus fotografías de perfil de Facebook por listones conmemorativos y se unieron a grupos de apoyo y solidaridad.

“Pero, ¿aprovechar los medios digitales en sus comunidades en realidad ayudó a los estudiantes a sanar? No exactamente, según los investigadores. La mayoría dijo que su actividad en línea los hizo sentir mejor, pero datos cuantitativos demostraron que los tuits, los mensajes de texto y las vigilias virtuales no tuvieron efecto en la recuperación de los síntomas de estrés postraumático o depresión”.

Bajo la premisa de que “la paz comienza creyendo”, el fotógrafo Diego Huerta se ha propuesto recorrer los 32 estados de la República Mexicana y capturar con su cámara 31 mil retratos como una especie de homenaje a las 31 mil personas que han perdido la vida en la sangrienta y cruda batalla que libran los cárteles del narcotráfico y las autoridades federales.

Esta peculiar gira que sólo durará seis meses, llegó a la capital poblana la semana pasada al zócalo de la angelópolis, en donde personas de todo tipo colaboraron con la iniciativa al posar con “la huasteca”, una paloma azul hecha en papiroflexia.

A través del sitio http://www.proyecto31mil.com/ va dando cuenta de esta iniciativa que demuestra cómo las más de 31 mil personas muertas por la violencia en México impulsan a los ciudadanos a querer generar un cambio desde la trinchera de la sociedad.

De hecho, el genio de la lente, hoy ya aprieta el clic en Morelia, Michoacán. Para ver el paso de este equipo y lo que opinan algunos poblanos al respecto, dale play al siguiente video publicado por el canal VideoyMensaje.

Bastó que Justin Bieber pronunciará dos simples palabras en español: “Arriba Zacatlán”, para que el Pueblo Mágico del estado de Puebla, se convirtiera en el mismo cielo ya que sus habitantes están que no caben de la emoción de tener a un representante de esas tierras en La Voz… México.

Oscar Cruz Sandoval es el “trending topic” en las redes sociales a nivel local. Una semana después de haber compartido el set de televisión con el jovencito que tiene vuelta loca a la “chamacada”,  este hombre de 43 años regresó al pueblo que lo vio nacer para grabar un par de tomas para el reality show en el que se mantiene en la lucha.

Resulta que el intendente de una escuela logró reunir a más de dos mil almas en la plaza principal del municipio poblano, donde no sólo le ofrecieron manzanas y pan, sino también el voto y el apoyo moral que necesitará en la nueva fase del programa con el que Televisa ha desplazado a la popular y ya desgastada Academia de Tv Azteca.

En Facebook el grupo “Yo apoyo a Oscar Cruz El Tipo en La Voz… México”, suma mil 300 simpatizantes, quienes comparten fotos, comentarios, noticias y enlaces que respaldan a este amateur de la música ranchera que tiene el privilegio de estar en el equipo del español Alejandro Sanz.