El Principito en totonaco
Jueves, Abril 18th, 2013Cuando tenía siete años de edad, el primer libro que tomé en mis manos por iniciativa propia fue el clásico de la literatura infantil: El Principito, de Antoine Saint-Exupéry. Fue un regalo de mi papá en mi cumpleaños, que acompañó con la frase: “para que sigas descubriendo el mundo de la lectura”. Aún lo recuerdo.
De El Principito aprendí que “lo esencial es invisible para los ojos” y que “sólo se conocen bien las cosas que se domestican”. Durante mi infancia solía releer el inicio del libro, en la parte justo cuando muestra a una víbora devorando a un elefante. O bien, cuando El Principito acudía con el farolero que prendía y encendía el único farol del planeta.
Las historias de El Principito revivieron este miércoles, cuando me enteré que el profesor de Educación Bilingüe en Puebla, Pedro Pérez Luna, tradujo al totonaco la obra de Antoine Saint-Exupéry, para motivar el uso de esta lengua en sus estudiantes.
Fue así como pasó de ser El Principito al libro denominado Waxa’aktsúPúxku’, que ya había sido traducido a más de 200 idiomas, incluidos el maya de Yucatán, el kaqchikel de Guatemala y el toba de Argentina.
La obra de Pérez Luna fue supervisada por la lingüista francesa Duna Troiani, quien escribió hace unos meses “Fonología y morfosintaxis de la lengua totonaca de Huehuetla, Puebla”.
Con ello, Waxa’aktsúPúxku’ se consolida como un libro que fomenta el uso y difusión del totonaco, en una región indígena de Puebla donde la lengua está amenazada por la sustitución lingüística del español.