Ser padre adulto mayor parece ser una tendencia en Hollywood, ya que después de que Robert De Niro anunció que había sido padre a los 79, se reveló que el actor Al Pacino, y su novia 59 años menor, Noor Alfallah, esperan a un bebé, pero ¿cuáles son los riesgos de tener hijos después de los 80 años?

Quizá exista la idea tradicionalista de que tener hijos después de los 80, como Al Pacino, es una prueba de virilidad; sin embargo, la decisión de ser padre adulto mayor podría generar riesgos para los hijos. Aquí algunos de ellos.

Riesgos biológicos de tener hijos como adulto mayor

La naturaleza es sabia y sabe cuándo se es biológicamente apto para tener hijos, ya sea en el caso de mujeres u hombres. Un ejemplo de ello, es que, al llegar a la etapa de adulto mayor, el cuerpo no se recupera de la misma forma que antes y los achaques comienzan a ser más frecuentes.

Sin embargo, tener hijos después de los 60, y más aún a los 80 años, como en el caso de el actor de ‘El Padrino’, Al Pacino, conllevaría riesgos que podrían afectar al bebé, pues nacería bajo de peso, sufriría convulsiones o tendría problemas respiratorios, según reveló un estudio de la Escuela de Medicina de la Universidad de Stanford.

La causa de estos riesgos, detalla el estudio, es porque conforme avanza la edad de los padres, se generan un mayor número de ‘nuevas mutaciones en el ADN de su esperma’, por lo tanto, ser padre después de los 80 años aumentaría los riesgos de tener un hijo.

Riesgos emocionales y formativos de tener hijos como adulto mayor

Además de los riesgos biológicos que podría tener un bebé después de los 80 años, como Al Pacino, existirían algunas consecuencias emocionales o formativas cuando el hijo o hija crezca.

De acuerdo con la ‘Guía de paternidad activa’ del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF, por sus siglas en inglés), uno de los puntos más importantes en la educación de los hijos es ser un ‘padre presente’.

Quizá un adulto mayor, de 80 años, que es padre reciente, viva muchos años más, para disfrutar de la infancia de su hijo, pero es probable que ya no esté presente en esa etapa más complicada, la adolescencia y juventud. Ante la ausencia del padre, los problemas de autoestima, dificultad en las habilidades sociales y líos escolares, serían algo común.

Por lo tanto, antes de desear ser padre una edad adulta mayor y aventurarse a tener un hijo después de los ochenta años, como Al Pacino, es importante tener en cuenta los riesgos que se llegarían a presentar.

Con información de Excélsior