Claroscuros de la economía mexicana en el sexenio lopezobradorista
Dr. Anselmo Salvador Chávez Capó
La situación económica de un país es el reflejo del desempeño de múltiples indicadores macroeconómicos, entre los cuales se destacan el Producto Interno Bruto (PIB), la deuda pública, la inflación, el empleo y la pobreza. Estos parámetros brindan una visión integral de la salud de la economía y permiten identificar tanto los logros alcanzados como las áreas de mejora necesarias para el desarrollo sostenible. A continuación, se presenta un análisis de estos factores en el contexto actual.
PRODUCTO INTERNO BRUTO (PIB)
El PIB es uno de los indicadores clave para medir el crecimiento económico. el sexenio actual ha estado marcado por una fuerte contracción en 2020 debido a la pandemia, seguida de una recuperación moderada. A lo largo este tiempo, la economía ha enfrentado desafíos estructurales, como la baja inversión privada, la desaceleración de la inversión pública en infraestructura y las persistentes desigualdades regionales. Los datos más recientes del INEGI señalan que en el primer semestre de 2024, el PIB ascendió 1.4 % con respecto al mismo periodo de 2023, por lo tanto se estima que al final del sexenio el promedio anual del crecimiento del PIB para 2024 será de entre el 1.0% y el 1.3% por lo que quedaría como el segundo más bajo después del 0.06% que se registró en el gobierno de Miguel De la Madrid, aunque el crecimiento económico ha sido menor al esperado al inicio del sexenio, la administración actual ha priorizado la estabilidad macroeconómica, la disciplina fiscal y los programas sociales, sin embargo los factores políticos pueden incidir en el crecimiento económico y aunque se ha logrado una recuperación, el crecimiento a largo plazo sigue siendo una tarea pendiente para asegurar un desarrollo económico sostenible y equitativo en México, como lo demuestra la estimación de Banco de México de un crecimiento del 1.5% para 2025, el impacto en la deuda pública se analizara en el apartado correspondiente.
DEUDA PÚBLICA
La deuda pública ha alcanzado niveles sin precedentes en muchos países, principalmente debido a los paquetes de estímulo económico implementados para mitigar los efectos de la pandemia, en el caso de México la Secretaría de Hacienda actualizó sus proyecciones al concluir 2024 y calcula que la deuda pública se ubicará en 49.7% del PIB, su nivel más alto en cuatro años. El aumento de la deuda será de 2.9 puntos porcentuales del PIB, comparado con el cierre del año pasado de 46.8%. En su reporte de las finanzas públicas y deuda pública a julio de 2024, la Secretaria de Hacienda y Crédito Publico precisó que, al cierre de julio pasado, la deuda neta del Sector Público Federal se situó en 16 billones 405 mil 182.7 millones de pesos. Cabe señalar que en el caso de que el PIB creciera únicamente el 1.5% este año, la deuda pública crecería a 52.3% del PIB, cabe señalar que este endeudamiento tan alto plantea desafíos a largo plazo, especialmente si las tasas de interés comienzan a aumentar. al mismo tiempo, una manera de coadyuvar el crecimiento económico es mantener políticas que promuevan el crecimiento económico y la certeza jurídica.
INFLACIÓN
La inflación ha sido un tema recurrente en los últimos tiempos, especialmente debido a los desequilibrios en la oferta y la demanda global, la escasez de insumos, el aumento en los precios de la energía y las interrupciones logísticas han ejercido presión sobre los precios, generando una percepción de inestabilidad. El efecto inflacionario alcanzo su nivel más alto en este sexenio en agosto del 2022 al llegar al 8.77% y observo durante el siguiente año una pendiente negativa que lo llevo a un nivel de 4.25% en octubre de 2023 sin embargo a partir de esa fecha la tendencia se revirtió hasta llegar al 5.61% anual en julio de 2024, conservándose arriba del 5% desde esa fecha, se debe señalar que este indicador lleva arriba de su meta que es del 3% (más/menos el 1%) 45 quincenas.
TIPO DE CAMBIO
Al inicio del gobierno actual en 2018 el tipo de cambio cotizaba en $20.453 MXN, presentando una fuerte apreciación que lo llevo a niveles mínimos de 16.5555 en marzo de 2024 (de ahí su denominación de superpeso) a lo largo del sexenio, el tipo de cambio alcanzó su máximo histórico de $25.1185 MXN el 24 de marzo de 2020. Durante los meses de junio, julio y agosto de 2024, el tipo de cambio del peso mexicano frente al dólar estadounidense experimentó una notable volatilidad, con una tendencia general a la depreciación del peso, el cual inicio con la victoria de Morena y su supermemoria,aunado a la sobrerrepresentación que obtuvo al momento de la asignación de los miembros del legislativo, lo cual ha llevado a una depreciación del peso del 17.60%, desde mayo del presente año hasta el cierre del 6 de septiembre de 2024 cuando volvió a romper la barrera psicológica de los 20.00.
Si bien la economía ha mostrado signos de recuperación postpandemia, persisten retos importantes en los ámbitos fiscal, monetario y social. Los logros en la reactivación del PIB y la contención de la inflación son razonables, pero falta mucho por hacer, el alto nivel de endeudamiento, la precariedad del empleo y la persistente pobreza requieren respuestas estructurales de largo plazo. Para consolidar un crecimiento inclusivo y sostenible, el gobierno deberá adoptar políticas que equilibren la estabilidad macroeconómica con la equidad social, enfocándose en la diversificación económica, la educación, la certeza jurídica y el fortalecimiento de redes de protección social., pero parece que en estos momentos prevalece más el encono político y la venganza personal de quien manda, que el Estado de Derecho.