Posted inJorge Calles Santillana

Doña Ceci, la pala y los desaparecidos

Doña Ceci, la pala y los desaparecidos
Doña Ceci, la pala y los desaparecidos
Posted inJorge Calles Santillana

Doña Ceci, la pala y los desaparecidos

Pala en mano, Ceci Flores, fundadora y líder del colectivo Madres Buscadoras de Sonora, acudió a Palacio a pedir atención para las madres mexicanas que buscan a familiares desaparecidos. El presidente pidió que le dejaran la pala y dijo que el martes informaría sobre los desaparecidos. El martes, Ceci vistió uniforme de beisbol—deporte favorito del presidente—tocó de nuevo las puertas del recinto y declaró a El Universal que difundiría “la ficha de la búsqueda del presidente López Obrador; lo vamos a buscar hasta encontrarlo, hasta que lo tengamos enfrente”.

El lunes mismo, la Secretaría de Gobernación emitió información sobre la cantidad de desaparecidos, a través de la cual corrigió cifras que anteriormente había proporcionado. La cifra oficial quedó en 99, 729 debido a que, se informó, muchas de las personas antes reportadas como desaparecidas han sido ya encontradas. El martes, doña Ceci se quedó esperando, con su uniforme de los Azulejos de Toronto, porque el presidente decidió dedicarle a Ricardo Salinas, a su campo de golf y a sus posibles deudas—asunto que debería estar siendo dirimido en las cortes y no en la opinión pública—cuarenta de los 120 minutos que duró su comparecencia. Bateadora paciente frente a un pitcher que es rey de las bolas de humo.

Tocar las puertas de Palacio para reclamar la atención se está convirtiendo en un poderoso recurso para enfrentar la hegemonía de la palabra del presidente y de sus “otros datos”. Resistencia civilizada que, sin agredir, busca romper el cerco informativo del presidente.

Datos de Statista indican que, desde 2006 hasta diciembre del año pasado, se han registrado en el país 97,153 desapariciones;15 diarias en promedio. Una revisión sexenal deja mal parada a la gestión lopezobradorista. En el sexenio calderonista, hubo 17,618 desapariciones forzadas; 8 por día. En el de Peña Nieto, acontecieron 34, 753, promediando 15.8 por día. En cinco años y un mes del gobierno de López Obrador, ocurrieron 44,782; 23.14 por día. Si agregamos las 2,576 desapariciones que existen de diferencia entre los datos de Statista (hasta diciembre del año pasado) y los de Gobernación (hasta el 15 de marzo), el promedio es de 24 desapariciones diarias, el triple de las registradas en el gobierno de Calderón, al que López Obrador ha calificado como “verdadero narcoestado”.

De acuerdo con Quinto Elemento, laboratorio de investigación periodística, hasta abril del año pasado, en México habían sido encontradas 5,696 fosas clandestinas, la mitad de las cuales, 2864, han sido halladas en este sexenio. Esto significa que, mientras en los doce años comprendidos por los gobiernos de Calderón y Peña Nieto menos de una fosa era descubierta al día, en el actual sexenio ha sido hallada fosa y media. Hasta 2016, esas fosas fueron localizadas en 393 municipios del país. En abril del año pasado, ese número había crecido a 570. Un crecimiento del 45 por ciento en siete años. Otros datos contundentes.

Ceci Flores no es una actora social extraña en el escenario político mexicano. Actualmente, hay registro de 234 colectivos de madres buscadoras, con presencia en 26 de los 32 estados de la república, según información de la Comisión Nacional de Búsqueda. Los desaparecidos son mayoritariamente hombres; pero son las mujeres quienes emprenden su búsqueda. Ante la ineficiencia de las autoridades, ellas deben estudiar leyes, aprender a integrar carpetas, a lidiar con cadáveres, además de antropología forense. En mayo del año pasado pidieron al crimen organizado no desaparecer a sus familiares, ¡solicitud que fue celebrada por el presidente! Más grave aún: ponen en riesgo sus propias vidas. Hasta la fecha, doce madres que buscaron incansablemente a sus hijos fueron sacrificadas como resultado de sus esfuerzos. Una de ellas en 2010; otra en 2017. Las otras diez, en estos últimos cinco años y medio. La impunidad ha echado raíces profundas.

En 2020 fueron aprobadas las creaciones del Banco Nacional de Datos Forenses (BNDF), el Registro Nacional de Personas Fallecidas No Identificadas y No Reclamadas y el Registro Nacional de Fosas Comunes y Fosas Clandestinas. La apertura del Banco fue anunciada en mayo de 2023; en agosto, la Fiscalía reconoció que no operaba plenamente. Luego informó a la ONU que operará hasta 2026. Sobre el segundo no hay información alguna y el tercero se encuentra aún inconcluso, según informaron las autoridades en octubre del año pasado. No es posible consultar el Registro Nacional de Personas Desaparecidas No Localizadas. Su página, contenida en el portal del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Social, no está accesible a la consulta pública.

Desinterés oficial por atender la criminalidad, falta de profesionalismo en las instancias encargadas de atenderla y frenarla, falta de atención a familiares de las víctimas, así como una creciente impunidad dan lugar a que México sea uno de los países en los que más personas desaparecidas hay.

Profesor-investigador de Sociología de la Facultad de Derecho y Ciencias Sociales de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP).
Secretario de Investigación y Estudios de Posgrado de esa Facultad.
Doctor en Comunicación de Masas por la Universidad de Iowa.
Analista político en noticieros de Televisa-Puebla y articulista en Puebla OnLine y Crónica Puebla.